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La saturación de contenidos generados por inteligencia artificial está impulsando un regreso a la autenticidad. Este artículo explica por qué las marcas están eligiendo nuevamente voces humanas: por seguridad legal, por identidad sonora y porque el público comienza a rechazar la frialdad de las voces sintéticas. La confianza no se genera con algoritmos, sino con emoción y verdad.

La proliferación de voces generadas por IA está planteando una urgente revisión de los derechos de los locutores: cómo se usan sus voces, bajo qué condiciones, con qué compensación y qué protección legal tienen frente a la clonación sin consentimiento. Este artículo analiza el estado actual en EE.UU., Reino Unido y Europa, casos emblemáticos, buenas prácticas contractuales y qué esperar en el futuro para proteger nuestra profesión.